lunes, 28 de febrero de 2011

Pirulipipí y Gorrión Gorrón


En lo alto de un abeto, allí donde no llegan las lombrices, ni los gatos, ni los niños… allí viven Pirulipipí y Gorrión Gorrón. Cada uno en su nido. Porque Pirulipipí y Gorrión Gorrón son dos pajaritos. Dos gorriones. Pirulipipí es amarillo. Su amigo, azul. Y les encanta jugar. En verano, cuando no hay cole, se pasan el día jugando y revoloteando por el bosque en el que viven. Más allá no pueden ir, sus padres se lo han prohibido, es peligroso y ellos aún son pequeños.
También les gusta mucho ir a visitar a Sir Jilguero… Todos le llaman así, pero en realidad nadie sabe cuál es su nombre. Es un jilguero mayor, que no habla mucho con los pájaros de los otros árboles del bosque Atrunkimunki, que es como se llama el lugar donde viven Pirulipipí y Gorrión Gorrón. Sin embargo, a Sir Jilguero no le faltan las palabras y las historias cuando los pájaros más pequeños vienen a escucharle. Con sus historias, que nadie sabe si son reales o inventadas, los deja con la boca abierta y en vilo hasta que cuenta el final.
Cuando hace calor, los dos gorrioncillos pasan las tardes en el arroyo, el oasis del bosque, donde las ranas croan y saltan mientras los pajaritos nadan y saltan desde las piedras para zambullirse en el agua. También juegan a ir dando saltitos de nenúfar en nenúfar. ¡Pero no vale volar! El primero que despliegue las alas pierde, y esa misma tarde, antes de que se ponga el sol, tendrá que encontrar una ramita (a la que el vencedor deberá primero dar el visto bueno) para seguir construyendo ese nido escondido que solo Pirulipipí y Gorrión Gorrón saben dónde está…

sábado, 26 de febrero de 2011

De buena mañana

Inauguramos el blog con la canción mañanera con la que te despertamos y que tanto le gusta a tu padre. Y que me cantaban a mí tus abuelos. Que duermas bien, mi reina.

Declaración de principios

1. Este es un blog con cuentos para ti, mi Sara.
2. Además de inventarme cuentos para ti, recopilaré otros que me gusten y que por algún motivo sean especiales. También te contaré historias de tu vida, o nuestras vidas, cotidianas.
3. Prometo escribir lo más a menudo que pueda... Ya sabes, soy esa señora que corre de un lado para otro sin parar.
4. Voy a recuperar los personajes de los cuentos que tu abuelo se inventaba para tu tía y para mí cuando éramos pequeñas: Pirulipipí y Gorrión Gorrón. No recuerdo las historias exactamente, pero sí cómo me los imaginaba yo.
5. Tus abuelos, tu tía y tu padre también escribirán cuando quieran, cuantos más seamos, más historias para ti.
6. Espero que te guste.